Unos de los símbolos naturales más famosos de una ciudad lo es sin dudas el Pan de Azúcar de Rio de Janeiro el cual es un conjunto formado por dos miradores naturales a la entrada de la Bahía de Guanabara: Morro da Urca (227 m) y el Pan de Azúcar (396 m). El más alto, una vista impresionante que se abre ampliamente en la distancia: los barcos en Praia de Botafogo, el Cristo, Pedra da Gávea…
Al anochecer la zona se pone aún más hermosa. Hay teleféricos modernos que hacen que el transporte de las dos estaciones se haga de manera rápida y fácil.
Sin la intervención humana, el Pan de Azúcar ya una atracción. Con el auge de teleférico y la vista que une el mar, las colinas y la ciudad, la visita es una necesidad o obligación por todo aquel que visita a Río de Janeiro.
En la parte superior de su cabeza hay un museo, inaugurado en 2011, que cuenta con actividades multimedia a través de la historia del teleférico y algunas curiosidades.
En el punto más alto hay una hermosa vista desde la cual todo el mundo comprende por qué Río es conocida como la Ciudad Maravillosa. Lo mejor es que se puede ir sin problemas. Puede que no tengas tiempo para hacer el recorrido de una hora y media (ida y vuelta), con paradas de 15 minutos. La mitad del viaje es sólo por el teleférico y desde el puedes elegir el mejor ángulo de visión para tomar fotos desde lo alto.
Cuándo ir
Todo el año. Prefiera ir en una jornada en donde no haya pronósticos de lluvia y en cambio de un cielo soleado y preferentemente sin lluvia.
Horario de atención:
Todos los días, desde las 8 a las 21 h (la taquilla cierra a las 19.50), que sale cada 20 minutos o cuando la capacidad máxima que se alcanza el teleférico (65 pasajeros)
Métodos de pago:
Entrada: 53 reales (ida y vuelta para dos etapas), Tarjetas de crédito: American Express, Diners Club, Hipercard, Mastercard y Visa. Tarjetas de débito: Maestro, Visa Electron y Redeshop